No te pienso
como eres.
No me pienso
como soy.
Ninguno somos
así. Alimenta
la intención a
sus monstruos,
hígados que
filtran alucinaciones.
No. Tus gestos
construyeron
palabras y las
palabras hechos
que mi
pensamiento habita
sin licencia. O
no. Maneras
de hablarnos me
donan
evidencias,
hechos que no ahuyentan
la trampa de
conocer lo cierto.
No es cierto tu
deseo de mi deseo.
El ansia sola
es única aunque
sienta de dos.
Te hizo así solo
tu ausencia.
Tu no estar.
Porque eres así.
Sin ti no serías
como eres.
Pienso, luego existo, aunque lo que pienso no identifique lo que soy sino lo que quisiera ser.
ResponderEliminarFeliz semana, amigo.
Una profunda reflexión Juan, hace pensar, pararse a leerlo varias veces...transmite tranquilidad, interiorismo.Me ha gustado.Un abrazo
ResponderEliminarHola Juanito:
ResponderEliminarLa esencia del alma nos hace ser únicos, pero no siempre se percibe tal como es, sino como quisiéramos que fuese.
Gran reflexión, Juanito.
Qué tengas una Feliz Semana!
Te dejo mi abrazo de alitas.
...de entre
Eliminarluces que se asan
sanan
aún el cándil
se retuerce
crece
y mece
y pasan
JUAN
nuestros
siniestros
ancentros
hechos
bella
reflexión
y en tus
palabras
nos
das
plenos
de
emoción...
un muy fuerte , fortisimo abrazo de tu amigo
que os saluda con el corazón .
j.r.s.
Películas de la vida misma, Juan. Verdades que a veces no interesa para nada conocer.
ResponderEliminarUn abrazo
Escribimos la vida a nuestro modo, Pepi.
ResponderEliminarOtra cosa es que debamos vivir al modo de ella. Pequeños secretos sin importancia.
Un abrazo
Somos únicos, Diana. Da igual el modo y en el modo. Lo que queramos que sea ha de adaptarse a lo que es.
ResponderEliminarDisfrutar, eso sí, el momento de pensarlo.
Un abrazo
Gracias Jose, por tu modo tan personal de decírmelo, que también emociona.
ResponderEliminarUn abrazo querido amigo