juanitorisuelorente -

sábado, 14 de enero de 2012

POLÍTICOS


Cuando inicié mi andadura en ésta casa, no hace mucho, un año y medio, decidí que no hablaría con hondura de política. No por miedo a alguna represalia (siempre habrá alguien que se sienta ofendido) sino simplemente porque es un oficio que no me interesa.
Ya me ocurrió en la mili; una pirámide de mandos en el cuartel in crescendo donde opinar sobre alguno de ellos o no hacer lo militarmente correcto te llevaba a un  juicio sumarísimo  y a acatar lo decidido sin rechistar.

La vida normal (quiero decir de la calle) es otra cosa, y ya no me refiero a la vía legal donde la razón casi siempre triunfa, sino a que en ella los temas a dilucidar son persona a persona y sin ampararse en las puñeteras influencias que pueda tener un cargo.
Yo a ti, y tú a mí, nos decimos las verdades a la cara, dejamos de hablarnos, y uno menos a la colección de conocidos o amigos.
Y ya está. Pues no.
Los políticos, y ante una afrenta no se conformarían con la pelea oral o escrita sino que luego porfiarían en borrar tu nombre hasta del libro de familia por ese ahora te vas a enterar de quién soy yo.
Una persona normal, de a pie, que no le apetezca tan desigual tú a tú, y en un terreno que tampoco es su lugar de esparcimiento, prefiere ignorarlos (relativamente, claro).

La democracia acoge a demasiados políticos gallitos o anti demócratas y su mal entendida influencia a demasiadas personas infelices. 

4 comentarios:

  1. podrán irrepeifarnos
    afanarnos
    decir
    que se subió
    lo que fiel bajó
    atajo
    a dejar
    a cegar
    a dar
    a estar
    pero nunca
    amigo mio
    más
    jamás
    tu duende
    o el mio
    nuestros
    duendes
    lo
    consentirán
    serán
    la roca
    que de agua
    el viento de sed
    que se abre
    para volar
    y ese ...ese don
    amigo JUAN
    que hecho niebla
    habla dentro de ella
    es coralino deseo
    y fuente que veo
    leo
    y me admira
    al llegar a tu lar...



    un fuerte abrazo para tí y tu esposa con todo mi afecto :


    j.r.s.

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  2. Cuánta verdad, Juan.
    Yo también soy de las que prefieren no hablar de política ni políticos. Tengo mis ideas, mis opiniones, pero me las guardo.

    ¡Biquiños!

    Carmen

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  3. Eso creo Jose, que nuestro duende como mucho se marcha pero a pescar y cuando regresa trae el zurrón lleno de peces. No hay como tener paciencia, y además porque ya hay mucho escrito.
    Original modo de decírmelo.

    Un abrazo de corazón

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  4. Carmen, los políticos al llegar al poder se trasforman, son otras personas. No es natural su actitud. Ni tampoco gratuito comentar los de la mili. Allí me ocurrió que a un chaval amigo de juergas y salidas de madre que era cabo lo ascendieron a sargento 1º, y el primer día en que lucía con orgullo su uniforme al cruzarse con nosotros, uno lo saludó de modo no formal y lo humilló delante de todos. A ese hijoputa no se lo perdonaré nunca.

    Un beso Carmen

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