Lo escribí hace un par de años, y hoy vengo de Cordoba, de su entierro. Entierro de los que dan frío. La verdad es que lo apreciaba, y sin doble fondo.
Desesperanzador pero hermoso. La sensación de soledad total en los cuatro primeros versos es lapidaria. La fotograsfía de cabecera del blog es estupenda, por cierto. Un abrazo.
Cada vez hay más personas solas, Mª Teresa. Y no solo mayores. Hay demasiada gente encerrada en sí misma, ajena a los valores básicos de la convivencia. Y de eso viene lo otro.
Es el hachazo que quise dar, en el momento de escribirlo, a esa familia apática sobre su mesa. Y ha sido triste final el de una persona buena con cuatro lobos en su entierro. La foto invita a ir al castillo de Cazorla.
uff, qué duro.
ResponderEliminartriste y buen poema
saludos blo
AY... AMIGO
ResponderEliminarQUE POEMA TAN FUERTE PERO TAN REALISTA.
ES ASÍ LA VIDA, TAL COMO LA PINTAS.
BESOS
PD LA IMAGEN ES FABULOSA.
Lo escribí hace un par de años, y hoy vengo de Cordoba, de su entierro.
ResponderEliminarEntierro de los que dan frío.
La verdad es que lo apreciaba, y sin doble fondo.
Saludos José Antonio
Así de dura y triste en demasiados casos, incluso en personas que han dado calor y han recibido muy poco.
ResponderEliminarUn abrazo Luján
PD.- Ésta imagen la cambiaré cuando me canse de mirarla
Qué triste la soledad
ResponderEliminardel que muere sin nadie
que le llore,
si que hay gente así,
por desgracia
Desesperanzador pero hermoso. La sensación de soledad total en los cuatro primeros versos es lapidaria. La fotograsfía de cabecera del blog es estupenda, por cierto. Un abrazo.
ResponderEliminarCada vez hay más personas solas, Mª Teresa. Y no solo mayores. Hay demasiada gente encerrada en sí misma, ajena a los valores básicos de la convivencia. Y de eso viene lo otro.
ResponderEliminarUn abrazo
Es el hachazo que quise dar, en el momento de escribirlo, a esa familia apática sobre su mesa.
ResponderEliminarY ha sido triste final el de una persona buena con cuatro lobos en su entierro.
La foto invita a ir al castillo de Cazorla.
Un abrazo Marcos