Mi vida es una isla
y me exijo de vez en cuando
abandonarla,
cruzar el puente que une
las dos orillas.
Si hago lo que debo,
si digo lo que se quiere oír
estar triste o alegre
es parte del día a día,
por eso salgo del círculo
a sentir libre
cuantas cosas creo verdaderas.
Si perder el control
me genera incertidumbre,
si me siento inútil e innecesario.
Si caigo como caí otras veces
habré de salir de aquella manera.
Pero si hoy estoy deprimido
nadie mejor que tu para saberlo,
para volver a tenderme
el puente de tu mano.
Si de pronto me siento capaz
y una fuerza inmensa estalla
en mi interior
en medio del caos.
Si ya no me culpo y evito castigarme
nadie como tú me ha dado vida.
Incluso en medio del caos
logras momentos concretos
que salvar
que siguen valiendo la pena.
(2.007)
Muy bellas palabras para iniciar el año y continuar la andadura en el duro camino de la vida.Me ha gustado mucho. Un abrazo
ResponderEliminarEsa mano siempre ahí, Juan, siempre dispuesta...ojalá no nos falte. Un abrazo
EliminarFeliz año, Juan...¡un abrazo! Te deseo un año lleno de poesía.
ResponderEliminarFeliz entrada de año, en fin, dejemosle hacer y que no se ponga nervioso.Y nosotros a seguir adelante y si es con poesía mejor que mejor... Un abrazo Marcos
EliminarAsí es,por eso no debemos dejar de nadar e ir y venir...para atraparlos.
ResponderEliminarBesos y feliz año.
Hola Marinel, esos momentos, sí, hay que ir hacia ellos y no quedarnos varados. Feliz trece; yo al menos no soy nada supersticioso. Un abrazo
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