Te
fuiste de tus horas húmedas
a
un destierro excelente. ¿Por qué el tiempo
te
come en su pensar? Su recuerdo
ya
no cumple años. Estar bien
queda
maltrecho por tu propia desolación.
En
tu nube das la espalda a qué eres.
Y
ese puente no ha sido un paso
a
la hoguera. Vestida de esplendor
es
la realidad para los ojos de los niños.
Desasido de ti ninguno te preguntará
qué
te pasa. No estar mojado
no
hace estar a lo perdido. Estás
en
una isla, sí, pero te da para comer.
-desolado y aislado tu poema. Difícil consuelo para este isleño. Abrazos.
ResponderEliminarSí hay personas que se aíslan aunque estén rodeadas de cariño y solo porque no es el que ellas quieren. Un abrazo Marcos
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