Por
calles de mi ciudad
se
hallan mis pasos perdidos,
muchos
de ellos enterrados
en
viejos pasos de niño.
Huellas
firmes de ceniza
que
solo arden donde miro,
mantos
de oscuro alquitrán
cuidan
aún sus latidos.
Pasos
dados poco a poco,
buscando
hallar mi destino,
pisando
calles de siempre,
viendo
mañanas de olvido.
¡Esos
de años de instituto,
llenos
de rostros y libros,
mis
pasos en el amor,
parecer
hombre de niño!
¡Y
aquellos equivocados,
pasos
que di sin sentido,
de
ir a ninguna parte,
de
hacer sin nada preciso!
Y
muchos di consecuentes,
construí
de ellos caminos,
pasos
por los mismos pasos,
pasos
por los mismos sitios.
Todos
laten habitándome,
todos
los di convencido,
si
los buenos fueron logros,
a
los malos hice sitio.
¡Bailén,
ciudad de mis pasos,
Bailén,
ciudad de mi sino,
a
ti canto este romance,
a
ti mis pasos dedico!
Toda una vida en unos versos, paso a paso.
ResponderEliminarLa ciudad que nos ve nacer y crecer es sin duda importante en esos pasos.
Un abrazo grandote, Juan.
Y mil gracias!!
Pasos que se van hundiendo en el tiempo por los mismos sitios, habrá a quienes les aburra eso, a mí me gusta. Gracias a ti Laura, un beso
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