juanitorisuelorente -

martes, 30 de octubre de 2012

EN FASE DE REDENCIÓN


(Imagen de la red)










Apoyada la cara en el cristal de las cosas
que forman parte de mi existencia
porque las veo a diario,
y el resto del tiempo intentando olvidar
que me sienta más viejo de lo que llegó a ser mi padre.

Alguna vez me da por pensar
que cada día amanece tiempo sobrado para todo,
sin embargo me paso el día buscándote
en lo que no tiene remedio,
esos sentimientos que traen la amargura de la mano.

Ni siquiera el amor me convierte ahora en héroe.
Te diría eso y luego que sería una pena
que no lo fuese. Estaría así solo
y más bien lo contrario. Sólo si lograra creerme.
Pero para hacerlo tendría que ignorar lo irrecuperable.

Te miro, a mí mismo como si mirara entonces,
la frontera que nos separa del resto del mundo,
la injusticia que no sé reparar. Algunas frases
sin demasiado sentido deambulan en mis sueños.
Tu presencia, firme, en esquivo silencio.

Estoy a tu lado, pero a tu lado no hay nadie.
Regreso al pasado, vivo lo vivido sin cambiar un gesto.
Poco puedo hacer si la luz de la concordia sólo brilla
en mis mañanas. Si la culpa sólo a mí
me pide cuentas. Y la pena.

2 comentarios:

  1. Hay momentos abismo...son de esos en los que profundizar se hace agónico.
    Mejor dejarlos pasar hasta que pinten otros más halagüeños.
    Besos.

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  2. Dos personas con el mismo carácter es difícil que se lleven bien, aunque el amor lo remedie miles de veces. Luego queda un perpetuo sinsabor tras la pérdida, quizá el de no haber hecho un poco más posible lo imposible. Un abrazo Marinel

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