juanitorisuelorente -

lunes, 15 de agosto de 2011

AQUEL QUE NO SUPO





AQUEL QUE NO SUPO

Me empeño en desestabilizar
la mirada conciliadora
que aplaca las voces
e intenta arrastrarme
a otros momentos ya vividos,
culmen de otros que no existen.

Me empeño en reescribir
en otras líneas lo que parece
desvanecerse como asustado
por su propio pecado, tentado
si nada queda que descubrirnos.

Me empeño en tenerme miedo,
a ti, a todo. Miedo
como un animal dentro
que me devora poco a poco,
que gruñe como dueño
 y decide sin saber de antes.

Me empeño sólo en tenerte
si te tengo, y luego
advertir cada instante ingrato
que te aleja,
mirándome sin verme,
como un cuerpo olvidado
que no envejecerá nunca.

Me empeño en herirte
y sangra en mí
cada lágrima tuya, cada gesto
de rabia
que no sabe imponerse
si cuyo único criterio es el amor,
que desinteresado de cuanto ocurre,
aletea torpe, y confundido.

Me empeño, obcecado,
en besar labios de nadie,
acariciar cuerpos de nadie,
en escuchar palabras
de otros labios
y así amarte con la fogosidad
del futuro incierto,
de sueños que nunca soñaste.
  
Me empeño, quizá, en pensar
continuamente, con esa autoridad
que emana el silencio, que no son
premeditadas las ideas
que me trastornan, allí,
donde añaden dolor por la distancia,
de aquel que no supo tenerte, ni tenerme.


4 comentarios:

  1. Como siempre, estupendos los versos.

    Saludos!

    ResponderEliminar
  2. Estos tienen al menos cuatro años. Son de un poemario al que le tengo un cariño especial. Quizá porque fue el principio de lo que realmente quería hacer.

    Saludos, Antonio

    ResponderEliminar
  3. ...CHAPÓ Juan , una maravilla que - estuve de
    acá para allá cosas de casa- intemporal a
    punto de no poder disfrutar...

    con todo mi cariño y un fuerte abrazo :


    j.r.

    ResponderEliminar
  4. Gracias Jose, pero las maravillas son siete, y esta andará por..., nada, una gracia sin gracia, perdona de nuevo.

    Un abrazo

    ResponderEliminar