juanitorisuelorente -

lunes, 28 de junio de 2010

POEMA CALIENTE

HIJO DE LA IRA

Cuando me ciega de ira entretejido asilo
cuanto se existe: las razones que no me quedan;
y mientras dejo resbalar lo fijo,
lo inmóvil,
y mientras campea, causa estragos, borra
huellas que costaron renuncias, nada
calla de ser verdad, nada miente adrede.

A pesar de ser pasado que atrae su afuera,
restos que ocupan vacíos claveteados,
remachados a conciencia, ruge loca
y tan rotunda la pasión que lo desbarata
y afronta. Se ahoga la belleza, la prudencia,
la madurez del ser, un rato sin morirse,
dejando hacer mientras se cuecen desgracias
arriba a gritos, mientras allí deja de ser
el hombre para arriba no dejar de ser hombre.

Culpa tiene lo tan mal vivido. Su parte
que he de unir a la mía. Y provocar.

Quién provoca viene a fastidiar, a ser
sin ser ni mancharse. Y no.

(para "Amores solos")

2 comentarios:

  1. Amigo Juan;

    Duro; muy duro este sentimiento en un momento donde casi seguro que al límite de la paciencia. Esas frases buscadas que nunca queremos que salgan y que posiblemente más tarde arrepentidas,
    expresan dolor y rabia. Rabia por la impotencia y dolor por personas y acompañantes de donde tu has sabido hacer un poema hermoso de contenido , doloroso de sentimientos.

    Buen trabajo amigo poeta, te sigo de cerca

    UN abrazopoeta

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  2. Amigo Antonio.
    Como en toda buena familia hay cosas injustas que nos sacan de quicio.
    Sería demasiado bonito lo contrario.
    Un abrazo, amigo.

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