El beso frío
que tu sumisión niega
es falso, ciega.
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Buen marinero,
la vida está haciendo aguas
y tú sin remos.
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Sobre tu llama
el pájaro anidó
feliz desnudo.
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Claros caminos
resurgen solitarios
donde hubo fe.
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Mundos inciertos.
Caballos sin descanso
giran y giran
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El amor duda.
Llamea inconsistente.
Placeres fríos.
El arte de los Kaikus me parece magia. Me veo incapaz. Quizás algún día me atreva ^^
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Una vez hice alguno pero no me salió tan bonito como a ti, te felicito por ellos.
ResponderEliminarUn beso.
Tengo por ahí atrás bastantes hechos pero a mi bola, sin la métrica de rigor, o sea que no eran Haikus, y ya me tiró de las orejas Marian Gardi.
ResponderEliminarHoy me he parado un poco más ahí con el metro dale que te pego, pero es que a mí los corset es que no...
Un abrazo Javier
Los auténticos han de versar sobre la naturaleza,
ResponderEliminarpero a mí me inspira más el ser humano.
No es dificil, María, sólo tienes que decir voy a hacerlo, y ya está, como todo en esta vida. Yo no sé -hay maestros de este arte que alucino- y más menos pues lo hago.
Un abrazo