(Viñeta de Napi, tomada de la red)
Allí donde se juntan
el disfraz y el cuento
-nada es real salvo el deseo-,
donde regalan panes y peces
a manos vacías,
resucitan sentimientos pisoteados
tras enterrar polvo y ceniza.
Allí donde hay piedras,
números encima,
promesas sinsentido
-decir por decir para decir-,
donde un ciego vería absurdo el
milagro,
habitan náufragos,
islas que luego la lluvia no
moja,
que la vida luego no agrede.
Tú lo has dicho con bonitas palabras: hasat un ciego puede ver que es absurdo prometer el milagro de salir de una recesión sin tener trabajo ni ingresos. La pescadilla que se muerde la cola.La bolita de nieve que rueda cuasta abajo y acaba sepultando a la ciudad.
ResponderEliminarDe nada vale la demagogia de la herencia ni el tú lo hiciste peor; la realidad la ven hasta los ciegos:a falta de pan, vamos a comernos las piedras. Un abrazo
La realidad es la que hay, heredada o no, pero culpables son todos, los que hay y los que hubo. Un político, para mí, sólo es un trabajador en la política, y como tal primero son sus intereses, un oficio privilegiado por otra parte, ya que, la mayoría, tienen un retiro de reyes aunque hayan sido un puto desastre. Un abrazo amigo Juan
EliminarNo sé qué más puedo añadir a lo que con bellas palabras dices y a lo que aporta Juan en su comentario. Amén.
ResponderEliminarUn abrazo Juan.
Pues eso, Elena, que los de las siglas, los partiditos, CCOO y compañía, es todo una pantomina, ya que todos son políticos, solo eso. Cobrar y vivir del cuento mientras que el cuento aguante. Un abrazo
EliminarCuanta verdad en tus versos, incluso se lee entre lineas todo el teje y maneje de los poderosos... los que mueven los hilos de las marionetas que somos nosotros, el pueblo, como tu dices hasta un ciego puede ver la verdad de la verdadera verdad.
ResponderEliminarUn aplauso enorme a tu pluma y laureles a tu talento.
Un abrazo enorme desde mi distancia Poeta.
Gracias Solina. Lo que hoy ocurre y nos ocurre está en cualquier libro de historia, incluso antigua, muy antigua. Un abrazo
EliminarQue interesante y bella manera de explicar el caos en que estamos inmersos
ResponderEliminarSaludos
Hola Pilar, gracias por venir y por seguirme. Pasaré a visitarte y ya hablaremos de esta pasión por las letras que compartes. Saludos
EliminarMuy buen poema, Juan y perfectamente ilustrado, tanto por la viñeta como por la realidad. Un abrazo.
ResponderEliminarLa viñeta me ha parecido genial, idónea para el caso, un caso crudo y que nos atañe más que nunca, tal vez porque cada día sabemos más de lo que pasa. Un abrazo Marcos
EliminarHarta me tienen. Todos ellos.
ResponderEliminarUn abrazo indignado ( o dos).
Mal tabaco, que decimos por aquí. Creo que vivimos el momento de más incertidumbre de la crisis, el más caótico. Llamarse indignado empieza a ser un término inocente. Un abrazo Laura
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