Llega julio con su manto de nieve,
su quietud programada, y es cierto,
su tapiado a lo urgente
que se empapará de sudores
y deseos de agosto.
Llega julio helado de memoria,
en llamas de otros recuerdos de julios,
de sus principios abiertos, sus espacios
indefinidos, sus arenas descalzas,
pero frío, frío, de la magnitud del olvido.
Llega julio y su copa llena,
con su brindis de sol y paréntesis de sombra
llega julio
ResponderEliminarcon calor,
pasión,
Color y
lluvias.
un gusto estar de nuevo Mario
Bella metáfora!!!
ResponderEliminarFeliz inicio de semana, estimado amigo.
Y frío de junio, Mario, aquí -y por muchos sitios supongo- las vacaciones logran que nos olvidemos por unos días de quienes somos. Hace falta, que la cosa anda jodida.
ResponderEliminarMe alegra volver a verte por aquí, un abrazo
Gracias, María Jose,
ResponderEliminarte deseo lo mismo, aunque la intensa calor va a ser protagonista, pero bueno, en el sur y por estas fechas, grado más o grado menos...
Un abrazo