Verde es rey de tus colores,
vistes
corazón de invierno,
y
del brillo de la vida
hay
solo un leve destello,
te
mataron la inocencia
con
vil tinte navajero,
dejaron
a la intemperie
hasta
el menor de tus sueños,
donde
el mar los abandona
al
abrigo de los vientos,
y
en ese infinito azul
soledad
es todo puerto
porque
el mundo ya es ceniza
de
las puertas para adentro.
Lo
que sigue ya es historia
y
en sí misma lo de menos,
si
el futuro es el presente
y
el presente los recuerdos,
un
sentimiento inmutable
que
camina en los espejos.
Comenzar
a descubrir
un
mosaico de otros versos
fue
un abrazo sin olvido
y
la lluvia en el desierto,
como
quién roza la luna
sin
caberle otro te quiero.
Y
al oficio de estar vivos
te
desnudas en silencio,
los
amigos, la familia,
con
el fondo en blanco y negro,
con
alguna rosa roja,
con
la flor de algún almendro,
con
otra alma despoblada
que
te quiere sin remedio,
vuelve
a dar vida a tus labios
y
a encender la luz del tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario