Siempre en contra de la mayoría
y a favor de la urgencia
no me sirve el espejo riguroso
que solo refleja edades de antes.
Hay razones que no buscan su sentido,
deseos que invaden postreros naufragios,
realidades agónicas que ya no buscan sanarse.
No me llama ciego el placer por lo oscuro,
arder tiene el fuego y el monte donde saciarse,
no daña hallarse lejos, en el confín del tiempo,
si se entrelazan el sueño y su ardor despierto,
si cede a veces el modo definido de lo plausible,
si la sangre exige su antojo:
formas rotundas que palpiten un secreto frío.
(de "Perro viejo")
No hay comentarios:
Publicar un comentario