y un sufrimiento innecesario.
Sin sangre abre una herida que sola
sabe cerrarse. Cuando pasa
por mi lado suspira pidiendo latidos
y el tropezar de alguna mirada cristalina.
Cuando se aleja se queda en su balcón
a mirarnos hurgando en el pensamiento
por si al fin ha puesto cierto en duda.
Pero no nos ocurre nada.
No ha logrado aún su instante detener
su tiempo, provocar verdades
que escriban recuerdos.
Pero vuelve esperando.
(de "Perro viejo", 2010)
Muy bello.Encantada de saludarte.
ResponderEliminarGracias Milagros, y por tu visita.
ResponderEliminarSaludos