Qué manera de manejar palabras Juan, lo tuyo es puro malabarismo.Cuántos niños, cuántas casas que ya no son.Un abrazo.
Yo a eso lo llamo raíces... me ha gustado mucho como todo lo que escribes.Un besazo
Sigo yendo a esa casa a diario -tenemos allí la oficina- y allí ya no vive nadie. A veces asaltan los recuerdos.Un abrazo Elena
Hay lugares que conservan las voces de las personas que allí claudicaron. Sus cuerpos invisibles deambulando como si no pasara nada.¿raíces? yo no sabría como llamarlo.Un abrazo Pepi
Qué manera de manejar palabras Juan, lo tuyo es puro malabarismo.
ResponderEliminarCuántos niños, cuántas casas que ya no son.
Un abrazo.
Yo a eso lo llamo raíces... me ha gustado mucho como todo lo que escribes.Un besazo
ResponderEliminarSigo yendo a esa casa a diario -tenemos allí la oficina- y allí ya no vive nadie. A veces asaltan los recuerdos.
ResponderEliminarUn abrazo Elena
Hay lugares que conservan las voces de las personas que allí claudicaron. Sus cuerpos invisibles deambulando como si no pasara nada.
ResponderEliminar¿raíces? yo no sabría como llamarlo.
Un abrazo Pepi