PRESENTE
A pérdidas estamos
que no son pérdidas,
verdades si acaso.
Donde no hay no existe
el olvido, donde no habrá
no malgasto milagros.
La necesidad memoriza nombres
y los repite a menudo
sin darse cuenta.
¿Hacen falta maestros para saber?
Lejano queda lo más cerca.
Ajeno de oído, de palabras.
Cementerio que habita
no muerta la memoria.
Sin ruido.
(último poema para "La soledad del hermano"
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